Cinco años después de su desaparición, Lucas y Annabel encuentran a sus sobrinas, Lilly y Victoria, en una siniestra cabaña perdida en el bosque. Nadie sabe con certeza cómo han sobrevivido todo este tiempo y, una vez en casa de sus tíos, las dos pequeñas no cesan de hacer referencia a la presencia de Mamá, un extraño ente que parece haberlas cuidado en el bosque y que no está nada contento con que le hayan arrebatado a sus niñas.
Por méritos propios, Mamá se ha convertido en uno de los estrenos más exitosos de lo que llevamos de 2013 y una propuesta decente para el cine de terror. Dirigida por el debutante Andrés Muschietti, que procede del mundo de la publicidad, y basada en un guión que escribió él mismo junto a su hermana Barbara, Mamá viene apadrinada por Guillermo Del Toro, responsable de películas como Hellboy o El laberinto del fauno. Que el productor de Mamá sea el mencionado director mexicano no me hacía demasiada ilusión, pues que le definan como un visionario cuando no hace más que embarcarse en proyectos cinematográficos que no termina me parece una estrategia de márketing más. Su mano se nota en el acabado de Mamá, que comparte estética y temática con otras películas del propio Del Toro o producidas por él, como la irregular No tengas miedo de la oscuridad.
Mamá tiene un buen arranque, y durante la primera mitad de la película destaca la habilidad de Muschietti para la creación de atmósferas terroríficas en las que prima lo que no se muestra en pantalla por encima los tópicos del género que The Cabin in the Woods satirizó con ingenio, lo cual es de agradecer en los tiempos que corren para el terror cinematográfico. El director opta por un estilo limpio y cuidado que transmite tensión a los espectadores, y lo combina con cierto desarrollo de personajes, adentrándose en las personalidades de los miembros de la disfuncional familia protagonista, lo cual siempre es de agradecer. Sin embargo, según nos acercamos al final, la trama de Mamá pierde bastante fuerza, sobre todo en lo que concierne a la criatura paranormal que da nombre a la película, cuyo origen es demasiado tópico, mil veces visto y nada espectacular.
La sombre de Del toro se aprecia en los elementos fantásticos incluidos en la historia, así como en la fotografía y estética de la película. Dejando de lado al productor, Muschietti ha sabido manejar a un reparto convincente y sacar provecho a dos actores emergentes con mucho potencial. Nos referimos, por supuesto, a Nicolaj Coster-Waldau (más conocido como Jamie Lannister gracias a su interpretación en la serie Juego de Tronos), y a la todoterreno Jessica Chastain (deslumbrante en La noche más oscura). Una vez más merece la pena alabar el trabajo de esta gran actriz, pues su personaje, Annabel, es de lo mejor de Mamá, capaz de transmitir cierta ternura y emoción dentro de una película de terror.
Curioso debut de Andrés Muschietti, Mamá supone una entretenida película de terror que evita la mayoría de los tópicos del género, si bien termina cayendo en otros, y que cuenta con la presencia de una pareja de actores de mucho potencial.
4 comentarios:
Si no existiesen sus últimos diez minutos...
Esta no es para mi, que soy muy cagona!! :-P
A mi me convenvió bastante. Me pareció una película de terror más que digna, que presenta a un director a tener en cuenta. Y el final no me parece blando, sino coherene con lo que viene mostrando, y además emotivo. Esta película es todo lo que debería haber sido "el orfanato" y que no fue: una propuesta de terror que puede llegar a emocionar. Si te interesa hemos hablado hace poco de ella.
Saludos
Yota: En general los últimos 40 minutos no me gustaron nada.
Meg: Consigue generar bastante suspense, sobre todo al principio, así que no te la recomiendo :)
La gata con gafas: Creo que sí que empieza con fuerza y con posibilidades de convertirse en una propuesta más que digna, pero luego decae y en el final los tópicos se suceden.
¡Gracias por comentar! ¡Saludos!
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